martes, 4 de octubre de 2011

Unas vacaciones normalitas

Mis vacaciones de este verano fueron más o menos como las de los otros años. Lo único que cambió fue que no fuimos a la casa alquilada de siempre.

Lo más destacable fue que el primer día de playa casi me trago medio océano después de que una ola me diera muchísimas volteretas debajo del agua.

Varios días más tarde nos encontramos con un amigo de mi hermano David y con sus padres. Esa noche mi hermano David y su amigo se fueron de marcha y volvieron a las 5 de la mañana; lo peor es que esa noche tocaba oír los ronquidos del amigo de mi hermano.

Al fin llegó el día de volver a Ourense, a mi casa, a ver a mis abuelos, a mi perro…y por lo tanto a la rutina diaria.

Pablo